Por David Mat.
Sello: Reflections Records.
El Metal contemporáneo requiere reinventarse, experimentar y mezclarse con otros estilos aparentemente irreconciliables entre sí. Y, al mismo tiempo, el Diablo también quiere (y debe) renovarse para atraer más acólitos a través de su música. En este aspecto, el Black Metal es el que más beneficiado ha salido, pues sus habituales atmósferas de carácter denso y pesado han resultado perfectas para mezclarse con casi cualquier otro género, como el shoegaze (Alcest), las estructuras rock’n’roll (Satyricon) o, como en el caso que nos ocupa, el Field Holler o música de esclavos, engendrando de este modo una nueva subespecie que engloba música espiritual afroamericana (blues, jazz y gospel), Black Metal y electrónica.
Al Diablo no se le agotan las fórmulas, y esta vez ha elegido tomar la de Manuel Gagneux, un suizo-americano residente en Nueva York, para dar rienda suelta a su curiosísima propuesta, “Devil Is Fine”, digna de admiración (a pesar de su brevísimo minutaje) aunque sólo sea por lo insólito de su planteamiento: Black Metal de los campos de algodón, tan simple como eso. Aunque no todo el campo es orégano (algodón en este caso), pues a veces da la sensación de escuchar un pastiche hecho con retales de aquí y de allá, echándose en falta un poco más de profundidad, cohesión y empaque en el resultado final para que el oyente pueda sentirse absorbido en el particular universo de Zeal & Ardor.
Abre el disco “Devil is Fine” el tema más lacerante. Una liturgia obsesiva que logra abrirse camino en la mente y alojarse allí durante días, estimulada por almas encadenadas, mientras profesan su devoción “al que tiene muchos nombres”. Porque, al fin y al cabo, el Diablo provee. El Diablo es amable. El Diablo está bien. Continúa el disco con “In Ashes”, atacándonos por sorpresa con lamentos en clave gospel mugriento. Un gospel desesperado, animal, cavernoso, sombrío, con extraños ritmos tribales que evocan un culto secreto demoníaco entre arrebatos pseudo-Black Metal. “Sacrilegium I”, es el primer interludio, un plañido lacerante emitido desde algún minarete entre volutas electrónicas que poco tiene que ver con la cadencia del tema anterior, ideal para romper la tónica del disco y añadir textura al conjunto. El siguiente tema, “Come On Down”, es probablemente uno de los cortes más representativos del disco y nos trae unas voces antiguas, rotas, muertas, cantando su particular blues y descendiendo su desdicha a los infiernos. Como una Santa Compaña errando por latitudes sureñas, llevando su condena a cuestas.
Le sigue “Children’s Summon”, un réquiem en toda regla, oscurísimo, que juega a despistarnos con sus velocidades y cambios de tono. Es tiempo del segundo interludio y llega “Sacrilegium II”, un breve entreacto protagonizado por un tétrico piano de juguete que da paso a “Blood In The River”, un tema perturbador hostigado con los sonidos de esclavos picando piedra, mientras las cadenas de sus tobillos resuenan rítmicamente, entre súbitos ardores Black, al son de su letanía macabra. “What Is A Killer Like You Gonna Do Here”, presenta un ligero cambio de registro sin dejar ese halo maldito. Aquí, una susurrante voz empapada en tabaco y whiskey nos habla de crimen, sangre y muerte, arrastrándonos hacia espirales jazzy, mientras acaba por fundirse con una sencilla guitarra blues que nos lleva hasta “Sacrilegium III”, tercer interludio y cierre del álbum, que parece uno de esos inquietantes instrumentales compuestos por I Goblin para algún oscuro film de Dario Argento.
“Devil Is Fine” no será el mejor trabajo de Metal del año, pero desde luego este trabajo es un primer paso muy esperanzador para una propuesta tan arriesgada como la que presenta Zeal & Ardor. Esperemos que “Devil Is Fine” no sea flor de un día, que Manuel Gagneux lo haya usado para tantear el terreno, como avanzadilla para ver cómo responde el público y que el próximo trabajo presente un contenido más homogéneo y sólido, de esos que logran llevarse al oyente a un mundo paralelo. El que esto suscribe, al menos, está seguro de ello.
Tracklist:
01. Devil Is Fine
02. In Ashes
03. Sacrilegium I
04. Come On Down
05. Children’s Summon
06. Sacrilegium II
07. Blood In The River
08. What Is A Killer Like You Gonna Do Here?
09. Sacrliegium III
