Sé que sueno muy repetitivo, pero no puedo dejar de quejarme del apoyo que la mayoría de medios de este país está dando a grupos de mierda, de consumo rápido, de usar y tirar, de temporada y con fecha de caducidad hasta que surja el próximo «flavor of the week» en forma de grupitos cuidadosamente prefabricados en los laboratorios de las discográficas. La cultura del mínimo esfuerzo y el creciente desinterés por la buena música son los responsables de que pocos se molesten en rascar la superficie y descubrir bandas realmente buenas aquí, en España. No sólo Andalucía está rebosante de nuevos valores (Grajo, Primatah, Pájaro…), también Valencia siempre ha sido tradicionalmente cuna de excelentes músicos en todos los géneros; del Jazz al Post-punk, y de la clásica al Hard Rock. También han habido errores, como Francisco, pero eso ya es harina de otro costal (aparte de que pertenece más bien a Alicante).
Uno de los grupos más excitantes que han salido últimamente de la capital levantina es Thee Vertigos, compuesto por Dani (guitarra y voces), Fer (guitarra y voces), Mau (bajo) y Carmona (batería). El cuarteto continúa la tradición R’n’B psicodélica-60’s que es desde hace tiempo una seña de identidad musical en Valencia; y lo hace con tal maestría que a veces me hace dudar que sea una banda actual, ya que tiene el espíritu de aquéllos grupos de la British Invasion sesentera que jugaban a ser bluesmen, pero añadiendo toneladas de psicodelia, deliciosos juegos de guitarras acústicas y eléctricas, a veces surferas, a veces cargadas de mala leche, a veces fronterizas y ese bajo jazzy envolvente que le imprime personalidad al conjunto del disco. «Shades» es su primer disco, tras el EP «The Swirling Sounds of Thee Vertigos» y es ideal para disfrutarlo entre colegas, humo y bebidas, o lo que se tercie.
