Tres Mts. comenzó a gestarse hace muchos años, concretamente en 1989, cuando Jeff Ament (por entonces en Mother Love Bone) vio un concierto de una banda llamada King’s X en el Central Tavern de Seattle. King’s X presentaban una obra maestra como Gretchen Goes To Nebraska, que les empezó a colocar en el mapa musical con temas inolvidables como Over My Head o Summerland. Ese sonido tan personal y especial de la banda; y ese bajista negro, zurdo, de largos brazos y desgarbado con un mohawk llamado Doug Pinnick, no pasaba precisamente desapercibido, y menos para Ament.
Tres años después, y con la admiración de un fan (y ya en Pearl Jam) Ament y sus compañeros invitaron a King’s X para que abrieran varios shows. Curiosamente Ament opinaba que los pioneros del grunge fueron King’s X. Tras fraguar una amistad, los dos se preguntaron «¿cuándo vamos a a hacer un disco de heavy R & B tú y yo?». Pero no fue hasta el 2001 cuando Ament y Doug se juntaron con el batería Richard Stuverud (del grupo The Fastbacks y asiduo de la escena Seattle, colaborando también con el propio Ament en su otra banda, Three Fish) para hacer sesiones en Montana escribiendo temas y tocando. Esas sesiones las hicieron anualmente, a modo de ritual. Y ya en 2004 Mike McReady se unió a la banda (aún sin nombre) para ayudar a componer y grabar como un miembro más.
Pero un buen día el proyecto se quedó estancado, por los compromisos de dUg con King’s X y sobre todo por la mastodóntica y millonaria maquinaria de Pearl Jam. Finalmente en 2010 tenían ya 13 temas y ya estaban listos para la mezcla y masterización. El final de toda esta romántica historia llegaba a su fin en forma del esperadísimo (sobre todo por ellos) disco, editándolo en la propia discográfica que tienen Pearl Jam, Monkeywrench Records. Por fin se regalaban y nos regalaban el ansiado disco.
Pinnick estaba encantado con el resultado y también porque en lugar de tocar el bajo, como en su banda de toda la vida, se dedicó a la guitarra. La verdad es que dUg y Jeff podían ambos tocar bajo, guitarra o incluso cantar, y a priori no se sabía cómo se iban a repartir los papeles en su momento. Doug por lo visto se presentó un día en Montana con su Fender Stratocaster, e inconscientemente la cosa se quedó así. Lo que sí tenía claro dUg era que el cantante iba a ser él, cómo no!! Su voz es privilegiada… La verdad, es que esta crítica no la quería convertir en una loa constante a King’s X, porque lo merecen, pero como decía Ende, eso es otra historia y debe ser contada en otra ocasión.
El resultado final es una mezcla de pop, rock, soul, funk y tonos terrosos. El disco comienza anfetamínico con un «My Baby» rompedor, para seguir con «Oh, Lord» y su sonido peculiar y más oscuro y heavy. Comienza «God Told Me» y dUg y los suyos sacan su lado más soul en un precioso tema. «Makes Me Feel» se mueve en esos aires extraños en los que tienen cabida ritmos y percusiones tribales (como en algunos tema más) por parte de Stuverud, quien dicen de él sus compañeros que organiza muy bien las canciones y tiene un montón de buenas ideas. «Holes In The Road» nos levanta de la silla con su ritmo machacón y vacilón con un solo de McReady fantástico. Ahora cogemos un mechero con«In The Middle» porque dUg saca ese lado espiritual que es tan latente en él. Sin bajar el mechero viene «Life»,un tema melancólico como él sólo, con un embaucador teclado que atrapa hasta al más duro del lugar. Sin darnos cuenta nos topamos con «Afrosheena», que nadie podrá rebatirme que podría ser un tema perdido de las sesiones de Temple Of The Dog, porque suena por los cuatro costados. Pero es que «She’s My New Song» (y más en el video en directo que pongo) parece salir de Mad Season!!, con esa inconfundible guitarra de McReady a tope de reverb, y el ritmo y percusión que lleva Stuverud; aunque esa slide le da un aire bluesero y bastardo. «Utah» vuelve a ese rock con toques funk y alternativo. En «Break» sale, como es normal y hemos visto antes (con referencias a sus propias bandas pasadas, y por supuesto a clásicos como Hendrix, Neil Young o Led Zep), un poco la vena King’s X como balada. «Mistery» es un retorcido tema con melodía extraña, de lo más grunge del disco. Cerrando el disco «She’s My New Song (Reprise)»,que se presta muy bien a este reprise del tema, acelerando el ritmo hasta el cénit donde todo explota y te deja con la sensación (entre las risas de los protagonistas) de que esto acaba y muy bien. Como postre, por la red pululan un par de bonus tracks, uno es una es-pec-ta-cu-lar cover del «In Every Dream Home A Heartache» de Roxy Music, y el otro un corto y grungero tema llamado «I Smoke».
Lo que podría ser llamado una superbanda, no se ajusta con la realidad. Aquí no hay egos, luchas por imponer criterios o salir mejor en la foto, buscar notoriedad…. vamos, como muchas de los supergrupos que se nos pase por la mente. Esto es un grupo de amigos que siempre han querido tocar música juntos, sin fisuras, con una idea clara, que han escrito un puñado de grandes temas, y que capturaron en disco cuando aún estaban frescos, y todo eso se nota. Groovy heavy classic blues rock, ni más ni menos.
Tracklist:
1. My Baby
2. Oh, Lord
3. God Told Me
4. Makes Me Feel
5. Holes in the Road
6. In the Middle
7. Life
8. Afrosheena
9. She’s My New Song
10. Utah
11. Break
12. Mystery
13. She’s My New Reprise