Havok + Warbringer + Gorod + Exmortus.
Fecha: 27 de abril de 2017.
Sala: Salamandra (L’Hospitalet de Llobregat).
Promotor: Madness Live!
Crónica y fotos: Beto Lagarda.
De la mano de Madness Live, la Sala Salamandra de L’Hospitalet era la encargada de acoger a una de las giras thrashers más potentes del año; nada más y nada menos que los americanos Havok y Warbringer compartían un cartel acompañados de los californianos Exmortus y los galeses Gorod. Tras previo paso por la sala Caracol de Madrid, y como recta final de la gira que les ha hecho rodar por gran parte de Europa durante todo el mes de Abril, tanto Havok como Warbringer venían con nuevo trabajo bajo el brazo y ganas infinitas de gustar.
Puntuales, como ya es costumbre por parte de la promotora, arrancaban Exmortus. Los de Whittier, California, con una propuesta musical poco convencional donde el thrash y el death se mezclan con influencias neoclásicas, lo dieron todo desde el primer minuto. Aprovechando al máximo los pocos minutos que tenían, ofrecieron un show muy digno y completo. Aunque poca gente los conozca por aquí, la banda cuenta con más de 15 años en sus espaldas y cuatro notables discos editados. Moonlight Sonata sonando a lo Beethoven, o Metal is King cerrando el corto repertorio dejaron muy buen sabor de boca a todos los asistentes.
Minutos más tarde aparecían los franceses Gorod. El death metal técnico y progresivo de los de Burdeos no dejó indiferente a nadie. Con más tiempo que Exmortus para demostrar su potencial, los berridos y el carisma de Julien “Nutz” Deyeres, junto con la atronadora batería de Karol Diers y los chirriantes riffs técnicos de Mathieu Pascal y Nicolas Alberny, sumados a la impecable actuación del bajista Benoit “Barby” Claus (todo un espectáculo verlo en escena), los galeses se comieron el escenario. Interpretaron temas variados de sus cinco LP y nos mostraron Being a Jerk, un tema del nuevo EP Kiss the Freak lanzado este mismo año, consiguiendo que casi toda la sala Salamandra fuera un gran moshpit.
Warbringer saltaron a escena arrasando desde el primer segundo. Los de Newbury Park, California, arrancaron con cuatro temas de su nuevo y notable disco Woe to the Vanquished. Silhouettes, el tema homónimo Woe to the Vanquished, Remain Violent y Shellfire. El público tenía ganas de Warbringer y Warbringer tenía ganas de arrasar, y ¡vaya si lo hicieron! Mucho tendría que sudar Havok para igualar el recital que nos dejaron los californianos. John Kevill es un auténtico frontman/showman, y los cuatro músicos se muestran enormes; Carlos Cruz a las baquetas, Andy Laux en el bajo y las guitarras de John Laux y Adam Carroll dieron una magistral clase de thrash a los afortunados asistentes. No faltaron en el repertorio temas de sus otras obras, Prey for Death y Living in a Whirlwind del segundo trabajo Waking into Nightmares, Hunter-Seeker del aclamado IV:Empires Collapse, y el combo final del show con Combat Shock y Total War de su álbum debut War Without End. Completísimo espectáculo el que ofrecieron John Kevill y sus chicos.
Y a sudar se dedicó el bueno de David Sánchez para demostrar que el plato fuerte de la noche eran ellos; y a decir verdad, no defraudaron. Presentando su nuevo y arriesgado trabajo Conformicide, los de Colorado arrancaron la fiesta con Point of no Return y la sala se convirtió en una gran avalancha. Havok son un valor seguro en directo, y lo demuestran siempre que pisan los escenarios nacionales, muestra de ello es que el público les adora. Temas brillantes como D.O.A. , Fatal Intervention o Time is Up funcionan excelentemente frente a la multitud. Hasta cuatro temas rascaron de su nuevo disco, Claiming Certainty, Hang ‘em High, Ingsoc y Intention to Decieve , que en directo no pierden un ápice de potencia. Hasta nos regalaron una cover del T.N.T de AC/DC que el público coreó hasta la extenuación. Un David políticamente muy reivindicativo, se disculpaba innecesariamente por no saber hablar bien español, luciendo una barba que cada vez le asemeja más a Tom Araya (y es que por momentos, como en D.O.A., es para dudar de si canta Tom o David). Cabe destacar gratamente la actitud en el escenario de Nick Schendzeilos, recordemos que ingresó en Havok no hace mucho tiempo, pero tiene la capacidad de ganarse al público, a igual que Reece Scruggs con el hangbanging más radical que he visto en años. Brillante actuación de los de Denver, una docena de temas que pasaron demasiado rápido, dejando en todos ganas de más.
Gran gira de thrash y metal extremo la que hemos tenido la ocasión de disfrutar, gran espectáculo y una encomiable entrega por parte de las cuatro agrupaciones. Da gusto ver y disfrutar de momentos musicales como el de anoche.