Valiosa charla la que pudimos entablar con Fiar, letrista y vocalista de Foscor, con quien llevábamos tiempo queriendo conversar. Con motivo de la reciente publicación de su formidable último disco, ‘Les Irreals Visions’, preguntamos al músico catalán por el proceso de gestación de este primer trabajo de la banda desde el sello francés Season of Mist, en una conversación que nos permitió conocer la singularidad de esta extraordinaria banda en un momento tan crucial de su carrera.
Fotos: Raquel Garcia
El nuevo disco, ‘Les Irreals Visions’, es un nuevo paso en firme dentro de vuestra evolución musical, marcada por el giro que se produjo con vuestro trabajo previo. Háblanos un poco de ‘Les Irreals Visions’ y su concepto.
Saludos, gracias por interesaros por nuestra nueva obra y abrirnos vuestras puertas. De un modo u otro teníamos entre ceja y ceja que tras el proyecto truncado con el anterior ‘Those Horrors Wither’, este disco debía conseguir situarnos en un mayor nivel de posibilidades. Venimos preparando el terreno y trabajando en ello desde hace un par de años, y sin duda partimos con las mejores herramientas con las que jamás hemos contado. Ahora dependerá de nosotros defenderlo y posicionar el nombre del grupo en un lugar de credibilidad y significación que permita continuar con futuros trabajos como deseamos. Queda mucho por hacer, pero hasta el momento la fase de promoción y preparación de la salida del disco junto a Season Of Mist ha funcionado muy bien.
En cuanto al disco, estamos más que contentos con su resultado. Se ha trabajado con las ideas mucho más claras y una ilusión renovada por conseguir crear algo mágico sin temor alguno a alcanzarlo abriendo el espectro de herramientas hasta donde nuestra imaginación permitiese, sin atender a prejuicios pasados ni futuros que pudiesen entorpecer esa tasca.
Partíamos de elementos de referencia dentro de nuestra propia música, que han servido para construir una música única y emocional junto a todo lo demás a que hemos sido permeables en los últimos tiempos. Hablamos de estilos, recursos musicales, tipos de producción y estrategias artísticas. Buscábamos un proyecto lo más coherente posible que sirviese de perfecta carta de presentación para expandir y experimentar la música en todo su esplendor en una nueva etapa como Foscor.
Fíjate que estamos mencionando muchos elementos que componen la música, el concepto o el universo de referencias en el que se basa. Desde el paraguas de una modernidad pasada que resulta perfectamente actual discurrimos en un paisaje emocional atemporal por el que las cosas comunes deben adquirir un nuevo significado, las visuales una apariencia secreta y lo conocido, la dignidad de lo desconocido. Visiones y vivencias personales trazadas en un ambiente urbano / social que dibujan un mapa de interacciones a las que el ser humano se enfrenta en su día a día y de las que a menudo busca escapar.
El disco me ha encantado, aunque he de reconocer que me ha sido muy difícil llegar al fondo del mismo. He tenido que escucharlo en dosis pequeñas, diseccionarlo un poco y prestarle mucha atención. Lo que quiero decir es que (creo) es todo lo contrario a un disco inmediato. ¿Crees que es un disco fruto de un trabajo sesudo y calculado o sin embargo es una expresión más visceral?
Me alegra leer eso, gracias. Buscábamos reducir el nivel de información en los temas, algo más directo en cuanto a estructura y melodía, y sobretodo que permitiese recuperar un grado de emotividad que de buenas a primeras permitiese al oyente empatizar con la música más allá de sus herramientas, capas y elementos. Creo poder decir que a diferencia del ‘Those Horrors Wither’ este disco entrelaza y cose mucho mejor sus partes en cada uno de los temas así como en su conjunto, y ahí sí que el trabajo sesudo ha dado sus frutos.
Quiero pensar que es un disco de largo recorrido, pero a la vez de rápida conexión emocional. Llegar o no al fondo del mismo me da que es algo más personal que depende del tipo de música que esperes o estés acostumbrado a escuchar. Precisamente uno de los aspectos en que más nos hemos volcado, es en el de recuperar esa intensidad y densidad emocional que nos había caracterizado en los tres primeros discos y que parece que no supimos concretar en el anterior. Pero a diferencia de los primeros, el espectro estilístico no está tan acotado, y a quien gusta de identificar referencias quizás le resulte confuso.
En mi humilde opinión, ‘Les Irreals Visions’ tiene como punto fuerte esa equidad entre complejidad e inmediatez que puede acercar y enriquecer la experiencia a públicos de muy distinta índole. Eso se da tras tocar de forma acertada algunas teclas y por la combinación de Albert y Falke en el terreno compositivo que creo que han dado como resultado un disco muy fresco y emocional en lo superficial y rico en el fondo técnico y musical. Sí debo decir que de una colección de al menos 15-18 temas… y otras tantas ideas que no acabaron de concretarse en canciones, supimos elegir las que tenían mayor potencial de aunar todos estos elementos de forma diversa, rica y coherente. Que se pudiese identificar la propuesta de un modo propio y singular también ocupó mucho de nuestro tiempo… Pero nunca sabes si saldrá bien…
No he podido acceder a las letras, pero me parece que son todas en catalán, ¿es así verdad?
Correcto. Fue una decisión que perseguía singularizar todavía más lo que a nivel musical pudiésemos aportar. Ya sea por la sonoridad a la que no está acostumbrada el público nacional, mucho menos el internacional, como por el mayor nivel de expresividad que me permite a mí en el terreno de la interpretación, nos servimos de ello en pro de ofrecer algo distinto y personal. Así mismo, sirve de claro nexo con nuestra realidad más cercana, cultural, de espíritu y pensamiento.
Hay bandas de black metal, género del que procedéis, que opinan que para realmente sumergirse en su música debes conocer en profundidad sus letras, y acompañarles de un modo u otro en su pensamiento. Vosotros ahora parece que también defendéis algún tipo de mensaje, ¿Qué concepto hay detrás de este disco?
Llevo ya 4 discos encargándome del apartado lírico de Foscor…y sin duda tiene mucha importancia. Pero no deja de ser un elemento más del puzzle, como puede ser el visual, instrumental o la propia producción del disco. Todos ellas son decisiones que pueden desvirtuar la lectura general de la obra si no se toman de forma coherente y con una visión global.
A menudo es de lo que pecamos las bandas. De no tener en cuenta el grado de importancia que cada parcela tiene en el conjunto y en cuanto a la lectura de la que acompaña.
La lírica más que por lo importante que pueda ser, sirve para dibujar el mapa y lenguaje conceptual cuyo desarrollo quizás empezase mediante un color, una imagen o un estado emocional. A mi al menos me sirve para explicar lo que antes ha venido en una de esas formas y que se ha plasmado en forma de música.
Como explicaba en una pregunta anterior me interesaba desarrollar el mapa de las interacciones humanas desde un enclave cotidiano… En este caso por mi relación laboral con ello, el escenario urbano no es elegido de forma gratuita. Sirve de metáfora de ese entramado de lugares, caminos que los unen y forman tramas, que a menudo nos llevan a su margen y por ende a nuestro límite en pro de un cambio.
La experiencia tiene mucho que ver en ello, ya que nos hace leer cada situación de un modo u otro. Acertado o no para nuestros intereses.
En el texto promocional del sello, me ha llamado la atención un marcado acento hacia vuestras raíces catalanas, de modo que parece que se quiera hacer hincapié en vuestro origen. Las raíces de cada uno siempre aparecen en su música, pero ¿crees que en vuestro caso es algo que os identifique musicalmente o creativamente de alguna manera?
Hay una clara voluntad en eso que tan bien apuntas. Se persigue singularizar y resaltar más si cabe a nivel promocional lo que la banda de por sí ofrece y que como ya he explicado se ampara muy claramente en elementos característicos o puramente identificativos de una realidad cultural como una lengua propia. No deja de ser una estrategia promocional, pero creo que está totalmente justificada.
Fíjate en la cantidad de ejemplos que hay hoy en día a lo largo sobretodo de Europa en los que habiendo o no una conexión directa con el folclore propio de un lugar, el uso de elementos básicos para entender su idiosincrasia como la lengua o cultura literaria, gráfica, etc… enriquecen la propuesta y singularizan el lenguaje. No hablemos ya de Escandinavia… pero tienes a Solstafir o la corriente Black Islandesa en boca de todos, Sinistro desde Portugal, Dordeduh en Rumania o Alcest desde Francia que ejemplifican a la perfección lo que comento.
Desde las bases de los referentes culturales al uso de la lengua, hay elementos que nos sirven para trazar y enmarcar el paisaje emocional que luego pretendemos expresar mediante música y explicar mediante palabra e imagen, por lo que sin duda entiendo que nos identifica. De ahí que se busque hacer hincapié en ello si asimismo sirve para singularizar el proyecto.
Aprovecho para preguntar si políticamente os posicionáis de algún modo, o es algo que queréis dejar al margen.
Sin acritud alguna debo decirte que me sorprende que me preguntes esto viniendo de la pregunta anterior. Seguramente me encienda demasiado pronto y no deba, pero me da que el nexo de unión entre ambas preguntas reside en el hecho de tratar “vuestras raíces catalanas”, ¿me equivoco? Siento constatar cómo de revueltas están las aguas y qué poca comprensión se tiene de lo que representa tener una lengua y cultura propias. Quiero pensar que aunque mi posición personal o la de mis compañeros pueda estar en las antípodas de las tuyas o cualquier habitante de este u otro país, lo que representa Foscor y su lectura sirve a un objetivo mucho mayor que no atiende más que al terreno de las emociones.
No soy catalán, y por tanto no tengo una posición política al respecto, me siento espectador. Tengo distintos amigos en Cataluña, unos se posicionan de un lado, y otros del contrario, es algo que allí está generando debate, y de ahí la pregunta, a igual que preguntamos a grupos ingleses por el Brexit o a norteamericanos por Trump…
Por supuesto que nos posicionamos políticamente a nivel individual, y sin duda en el grupo las opciones que podamos tener tienen una especial y marcada sensibilidad hacia esta cultura, pero de ahí a conectar o posicionar a la banda políticamente va un trecho, y afirmo que no es el caso.
Que el explicar cómo elementos propios de ella pueden y han servido al fin de forma coherente para dibujar un conjunto artístico y conceptual más rico pueda conducir a una lectura politizada, se me antoja como poco un punto de vista erróneo.
Antes de anunciar vuestro disco pusisteis en redes sociales una serie de imágenes, “a modo de inspiración”, como queriendo sugerir algo… ¿Qué imágenes o creaciones artísticas son las que proporcionan a vosotros la inspiración?
De nuevo, son estampas cotidianas que encontraban un mayor grado de significación mediante la fotografía. Ahí residía parte de la actitud que antes describía y enmarcaba en el Modernismo y antes del Decadentismo. La huida de la realidad sujeta a quien ejerce el poder de influencia social.
Siempre nos ha interesado la búsqueda de la belleza, tratar y lidiar con ella e intentar capturarla en forma de música, imágenes o palabras. Eso sí, una belleza no clásica ni tradicional… a menudo ligada a lo macabro, a aquello que representa el extremo, el límite.
Esas imágenes que mencionas y que todavía a día de hoy aparecen como flashes, buscaban la estimulación sensorial. Ejemplos de un cruce sensitivo que parte de lo visual y busca poner en juego otros sentidos para definir la experiencia de un instante. Se aparecen en paseos y encuentros inesperados y sirven únicamente a ese gran objetivo de difícil alcance, que es el trascender.
¿Y musicalmente?
Hay muchas formas de expresión que nos inspiran… por suerte en los últimos años la música ha encontrado de nuevo esa chispa del fragor fundacional y creativo de otros momentos y sin miedo ni tapujos se sirve de infinidad de recursos para dilucidar nuevas formas de expresión que se antojan bellas.
Por esos extremos y límites creativos nos gusta deambular y experimentar lo que nos ofrecen. En los últimos dos o tres años ha habido grandes momentos musicales que de un modo u otro nos han hecho sentir que valía la pena ir más allá sin con ello se alcanzaba algo más bello. Desde Emma Ruth Rundle a Bölzer, de Interpol a Oranssi Pazuzu, de Gold a Aluk Todolo, Wovenhand o Chelsea Wolf, Sub Rosa o Tribulation… hay infinidad de grandes momentos musicales que quedaran por muchos años y que nos han ayudado a dar este paso.
¿Y qué esperáis que Foscor evoque en los que escuchan vuestra música?
A menudo se pone el acento en el tinte melancólico de nuestra música… es inherente, sin duda… una actitud romántica que llevamos en el ADN… pero creo que lo que debería sentir la gente al escuchar nuestra música es algo que se sitúa en las antípodas de lo que a priori significa nuestro nombre, luminosidad. Hablo de vitalidad, de energía e intensidad emocional que te obliga a seguir, por que ese es el único modo de volver a vivir, constantemente, el camino en plenitud. No tenemos un mensaje de pesadumbre, todo lo contrario.
En ‘Ciutat Tragica’ hay una colaboración muy especial, de A.A. Nemtheanga de Primordial, ¿Cómo se produjo ese encuentro?
Nos conocemos de hace unos años, y tras tocar con ellos en Lisboa y Madrid el año pasado y cruzarnos en el Roadburn en más de una ocasión, la relación se ha estrechado algo más. Alan tenía que pasar un sábado en Barcelona de camino a USA, y me pegó un toque por si me iba bien que nos tomásemos una cerveza. Nosotros estábamos grabando y le dije que me era imposible hasta llegada la noche, por lo que se me ocurrió preguntarle si le apetecía venirse al estudio y echar la tarde juntos. Le dije que si le apetecía, se podía cantar algo, y así lo hizo.
Para el recuerdo queda la transcripción fonética de la letra de ‘Ciutat Tràgica’ para que la cantara y las diferentes tomas que se sacó de la manga, cada cual con notas a mayor escala para crear armonías. Fue una agradable sorpresa e improvisación… de ahí que saliese tan bien.
Supongo que tendréis que hablar mucho de varias decisiones que habéis tomado para este disco, que serán muy comentadas. Cambios, que para muchas personas puede ser algo negativo, me gustaría hablar de eso, de los cambios, y que nos expliquéis qué propósito hay detrás de cada uno de ellos, si es que lo hay. Por ejemplo las voces limpias. El disco tiene un tono melancólico, realmente evocador, el uso de la voz es sin duda determinante para ello. Salvo un leve toque en algún tema todo el disco es cantado con voces limpias… ¿Es la voz que necesitaban los temas? ¿Estabas cansado de ese tipo de registro?
Creo que sí era el tipo de voces que necesitaba ese momento y proyecto. El abanico de posibilidades que nos ofreció en el anterior disco se intuía pero no se explotó como en ‘Les Irreals Visions’ a nivel armónico por ejemplo. De primeras, al encarar la composición del disco, la concreción y reducción de herramientas parecía una buena estrategia a seguir. Hay momentos del ‘Those Horrors Wither’ en el que la mezcla de registros se antoja poco fluida… partes demasiado dispares que deben componer un todo y que no siempre ayudan a conseguir ese objetivo.
Gusten más o menos las melodías de los temas, nos pareció que utilizar voces limpias ayudaría a concretar y definir más esa personalidad que tanto hemos perseguido, y que a oídos nuestros solo se ha esbozado en el pasado. Creímos que este momento requería llegar con cada decisión a las últimas consecuencias, para que de ese modo se diese mayor valor a cada recurso o herramienta. Ayudar a clarificar conceptos, primero en nuestro proceso, y luego en el de escucha para el oyente. Se ha hecho en varios aspectos como bien hemos apuntado y estamos muy contentos con el resultado que ha supuesto.
El trabajo de batería para este nuevo disco es muy bueno, pero para este disco parece que es un músico que se mantiene al margen del núcleo de la banda, como un miembro adherido pero no permanente, ¿es así?
Tras 12 años juntos, y haber participado en la grabación de los 3 anteriores discos, Nechrist deja de formar parte de esta aventura de forma consensuada. Teníamos muchas ganas de abrir una nueva etapa con este álbum, con ganas de que una vez más pudiese ser la definitiva que nos permitiera avanzar y vivir algo nuevo, y a él le faltaba la ilusión que los demás manteníamos. Fue algo natural, pero triste si piensas en que no vas a compartir más camino con alguien con el que has crecido.
Por ello decidimos trabajar de forma distinta. El núcleo de Foscor está bien definido con Falke, Albert y yo… cada uno desarrolla un papel muy claro en lo que a creación, coordinación y difusión se refiere, y eso mantiene al grupo en funcionamiento.
Luego piensas en que ofrecer proyectos o colaboraciones puntuales puede ser la forma más honesta de empezar una relación con un nuevo músico. Atraerlo a partir de lo que pueda y podamos disfrutar juntos de lo que se va generando. De ahí primero proponerle a Jordi el que grabara la batería del disco, y ahora, poder trabajar en los directos… No vine de la mano una cosa con otra, esa era la condición y así seguirá de momento. Congeniamos mucho, y creo que hemos entendido no solo el sentido si no el objetivo de este álbum y su propuesta artística desde un primer momento.
Sabemos que tenemos entre manos un proyecto que nos puede hacer compartir cosas muy chulas, así que, como pasa ahora con Esteban como incorporación al bajo para los directos, poco a poco iremos viendo como avanza todo y el nivel de implicación que cada uno quiere tomar más adelante. De momento no ha de ser mayor que el de estar preparado para los directos. Eso debe descargar de compromiso a todos por el bien del proyecto.
Recuerdo que cuando vuestro anterior disco, ‘Those Horrors Wither’, fue publicado mucho después de haber sido compuesto y grabado. La noticia de vuestro fichaje por Season of Mist se hizo junto a la noticia de la publicación de este nuevo trabajo, que también parece haber sido grabado hace tiempo, ¿son los temas muy antiguos?
Todo requiere un tiempo, y más cuando como en nuestro caso hay que buscar un nuevo sello con el que proseguir el camino. Realmente las primeras demos e intentos de crear temas fechan de hace 1 año y medio, incluso algo más. Fue a partir de Junio del 2016 cuando teniendo una colección ya definida de canciones, empezamos a concretar líneas vocales, letras y la idea de cómo sería la producción del disco. Pero a pesar de esta búsqueda, sinceramente creo que todo ha ido mucho más rápido de lo que inicialmente podía haber parecido.
El fichaje por Season of Mist se empezó a gestar en septiembre del pasado año, antes de entrar a estudio en octubre. Tras esto, entre el proceso de grabación, mezcla y master, nos situamos ya en diciembre, justo antes de que Jaime G. Arellano empezara las mezclas del nuevo de Solstafir, y de hacer efectiva la relación con el sello mediante la firma del contrato. En estos últimos 6 meses se ha seguido un ritmo de trabajo muy intenso en cuanto a lo que la discográfica llama la producción del disco y producto. Preparar diseños de los distintos formatos, entrega de masters, preparación de la campaña promocional y material que la acompañe como videos, etc…
El ciclo de este álbum para el público empezará tras este viernes 9 de junio con su edición física, pero realmente llevamos 4 meses efectivos de campaña promocional, y otros tantos des de que se grabaran los temas y viésemos qué teníamos entre manos. Mucho menos que lo que sucedió con Those Horrors Wither.
Aunque Season of Mist tiene en su catálogo grandes clásicos, en estos últimos tiempos está haciendo un reclutamiento de bandas realmente formidable. Un honor el pertenecer a su «plantilla», imagino, ¿no? Cómo se ha producido este fichaje? ¿Qué esperáis conseguir con ellos?
Un honor y la oportunidad que llevamos tantos años persiguiendo. El reto ahora es estar a la altura de esta plataforma y conseguir situar al grupo como una realidad del circuito internacional a todos los efectos. Que nuestra música llegue para quedarse, y que se pueda leer como una propuesta personal, más allá de que guste o más o menos.
Para ello, tenemos que dar otro paso adelante en lo que presencia en los escenarios internacionales se refiere. Solo así se hará crecer este álbum una vez concluida la fase promocional que todos habéis podido ver. Obviamente hemos de recoger frutos en forma de entrevistas o reseñas, pero si bien hasta el momento nos ha tocado trabajar en la sombra para preparar contenidos, ahora toca defenderlos en directo. Es el siguiente reto y en ello nos hemos de centrar.
Sobre el cómo se produjo el fichaje… pues se empezó a gestar de algún modo en la edición del Roadburn del 2015. Acabábamos de romper el proyecto que teníamos con Alone Records y Third Eye Society y me decidí por ir a ese festival con la intención de ver qué se cocía a nivel de industria. Recuerdo que incluso hablé con el manager general de Season of Mist para preguntarle si cabría la posibilidad de que distribuyeran nuestro disco, el Those Horrors Wither. Me respondió con una invitación a no dedicarle más tiempo ni dinero a ese trabajo y a crear un nuevo proyecto. Una vez lo tuviéramos listo para enseñar, sería cuestión de mostrarle unas demos y valorar si valdría la pena apostar por nosotros. Eso nos lleva a la edición del festival Holandés del 2016, cuando de nuevo me vi con él y advertí que en unos pocos meses estaríamos en disposición de mostrar alguna demo de un nuevo disco. Fue muy receptivo al respecto, y en septiembre del pasado año le hacía llegar una colección de 4 temas que de inmediato le dieron pie a querer trabajar con nosotros y enviarnos una propuesta de condiciones contractuales.
¿Qué hicimos durante el año que va de la primera edición y la segunda en la que advertimos de lo que estaba por venir? Pues intentar reflotar la banda tras una decepción tan gorda tras ver truncado lo que esperábamos que fuese un ciclo completo para el anterior disco. Dejando de lado que fuese o no un acierto, aquí estamos y hay que disfrutar y saber aprovechar el momento.
¿Qué le dirías a un seguidor de los viejos Foscor que ya no es capaz de disfrutar con vuestra nueva música?
Poca cosa se le puede decir si no es capaz de encontrar nada en nuestra actual propuesta que merezca su atención, tiempo y escucha. Entiendo perfectamente que haya gente que establezca unas fronteras infranqueables a modo de filtro en lo que a la música se refiere. Y no voy a ser yo quien les intente vender la moto a estas alturas sobre que si tras ambas etapas está la misma gente o la misma voluntad de emocionar.
Precisamente, como comentaba al principio, en este álbum nos hemos mirado mucho a nosotros mismos para concretar las últimas herramientas planteadas con las que seguir trabajando e incluso recuperar unas intensidades y densidades más propias de nuestros primeros trabajos.
Pero nuestro planteamiento en la creación artística no entiende de fronteras ni límites cuando se trata de emocionar. Hemos intentado ser coherentes con nosotros mismos y seguir un camino de crecimiento lógico, avanzando en una línea concreta que mucha gente percibe truncada desde la inclusión de voces limpias.
Sea como sea, me congratula ser capaz de haber emocionado a la gente con las distintas propuestas musicales que hemos sido capaz desde hace más de 15 años. De la forma que haya sido, si lo hemos conseguido, me parece digno de mención
¿Y a uno que le gustan vuestro última etapa pero no tolera vuestros principios?
Pues un poco lo mismo… Podría jugar en nuestra contra tener tras nosotros un historial que empieza a ser extenso. No tanto en cuanto a producción artística si no a años de existencia. Pero me parece muy interesante que hayamos sido capaces de crear un álbum como el Entrance to the Shadows’ Village hace como 15 años, y este Les Irreals Visions. No se puede entender el uno sin el otro… existe un proceso de aprendizaje que guste o no, habla de nosotros y sirve para establecer un claro marco para hablar de nuestra historia.
Cualquier persona es un mundo a la hora de establecer desde donde o hasta donde nuestra música lo emociona. Nuestra suerte es conseguirlo con más o menos fortuna y alcance desde hace tanto tiempo.
¿Ves complicado incluir todas las etapas de la banda en vuestros repertorios? Recuerdo que en vuestra anterior gira sí lo hacíais.
Tenía un sentido desde el momento en que el puente de unión con las voces rasgadas nos lo permitía, pero ya nos planteaba algunos problemas con la afinación. A título personal, los temas de los 3 primeros discos los hemos tocado infinidad de veces y nos apetece centrarnos en lo nuevo.
Teniendo en cuenta un set en directo de duración normal puedo afirmar que se centraría casi en su totalidad en el nuevo trabajo, no creo que deba ser de otro modo, coexistiendo alguno de los pertenecientes al anterior trabajo.
Siempre cabe la posibilidad de en un concierto especial, incluir repertorio de los primeros trabajos, pero estamos en otro momento y el cuerpo nos pide tocar lo que acabamos de plasmar y ofrecer. No puede ser de otro modo.
¿Qué es lo que tú llamarías un buen concierto de Foscor? En cuanto a decir que ha sido bueno para vosotros mismos, o para los espectadores.
Hemos llegado a dar conciertos de los que hemos salido decepcionados en lo personal y que han satisfecho al público des de alguna de las parcelas que componen un directo… pero sin lugar a dudas, siempre que hemos sentido que las cosas están saliendo bien entre nosotros, que controlamos el medio a la perfección y todos los aspectos técnicos caminan y nos permiten disfrutar del instrumento y el momento, el conjunto ha conseguido mejores resultados. Hablo de conseguir llegar al espectador transmitiendo energía y emociones…Cuando nosotros funcionamos y lo disfrutamos, más allá de aspectos técnicos, se produce magia y la conexión más pura entre creador y espectador. Es entonces cuando ambos formamos parte de un instante, partícipes de algo transcendente.
¿Creéis que hay un público diferente al habitual seguidor de Foscor que podría disfrutar de vuestra música? ¿Dónde crees que se podría encontrar?
Sin duda. Uno al que hasta el momento no hemos podido llegar por falta de medios, principalmente. Tener una infraestructura como la de Season Of Mist al lado expande el alcance de nuestra música no solo en cantidad de público si no en perfil.
No es lo mismo para ellos mover el nuevo disco de Carach Angren que el nuestro o el de Obsidian Kingdom. No se dirige al mismo público un disco de Altarage o Wormed que uno de Esben and The Witch o Solstafir. Más que sentirme cómodo o no con el ‘target’ de oyente al que se pretende captar, creo que la clave está en conseguir que se vincule a Foscor con algo especial y único que vale la pena catar, vivir o presenciar.
Hay mucha gente, cada día más, que no atiende a etiquetas y que como público está siempre ávido de nuevas sensaciones en el terreno de la música altamente emocional. Hay que tener en cuenta que Season Of Mist es un sello de Metal Extremo, pero si te fijas, en los últimos años ha abierto el abanico a un terreno en el que se introducen sin miedo tintes Post Rock, Post Punk, Indie o Progresivos…
Fíjate en un festival como el Roadburn, donde te encuentras a Misþyrming y a Emma Ruth Rundle en el mismo cartel. Es el claro ejemplo de espacio y público en el que se da valor a la creatividad y no se constriñe nada a las paredes de las etiquetas o herramientas que definen un estilo. Este público existe, y solo hay que tener los medios para picar a su puerta.
Puedes hacerte con el disco aquí: https://shop.season-of-mist.com/list/foscor
FOSCOR han editado cuatro álbumes, ‘Entrance to the Shadows’ Village‘ (2004), ‘The Smile of the Sad Ones‘ (2007), ‘Groans to the Guilty‘ (2009) y ‘Those Horrors Wither‘ (2014).
Foscor son:
Fiar – letras y voces.
Falke – guitarras y efectos.
am – guitarras, bajo y el piano.