Garage Sound Fest.
Primera edición – 14 y 15 de julio de 2017.
Aditorio Miguel Ríos, Rivas (Madrid).

Crónica por Daniel Álvarez.

Fotos: Dani Díez


Tocaba volver a Rivas para encarar la segunda y última jornada del Garage Sound Festival, una jornada que gozaría de mucho más público que la primera; cosa normal ya que era el día fuerte con Extreme como cabezas y acompañados de grandes bandas como Thunder o Ugly Kid Joe.



La primera banda a la que vería serían las finlandesas Barbe-Q-Barbies, quienes repartieron buen hard rock al público que allí nos encontrábamos. Dieron un concierto muy disfrutable, entretenido y que puso a todo el mundo de buen humor por el buen rollo que desprendían desde el escenario. Lo mejor del concierto fue la tirada final que hicieron, en la que sonaron canciones como All Over You, Let Me Out o STFU, con la que pusieron el punto y final a su actuación.

Los siguientes en salir al escenario fueron Terrorvision, quienes comenzaron su concierto dando una gran sorpresa. Y es que la primera canción en sonar fue Alice What´s The Matter, algo que desde luego no esperaba en absoluto y que sirvió para poner al público a cantar y saltar desde el primer instante. El concierto me pareció muy bueno, con un Tony Wright totalmente desatado en el escenario, contagiando su entusiasmo y energía a buena parte del público. No faltaron temas como Tequila, My House o American TV, aunque lo que acabó por desatar la fiesta fue ese Oblivion con todo el público cantando, cerrando así su concierto.


La fiesta continuaría con la presencia en el escenario de Ugly Kid Joe, que simplemente con su inicial Neighbor ya pusieron a la gente a cantar y bailar. No soy muy fan de ellos, pero la verdad es que su concierto me convenció. Gran sonido, gran actitud y grandes temas. So Damn Cool, Cat´s In The Cradle o I´m Alright fueron algunos de los temas que la banda interpretó. En la recta final del concierto también tocaron Ace Of Spades de Motörhead y la indispensable Everything About You. Un gran concierto que para muchos se convertiría en un sueño cumplido. Una banda que marcó a una generación que ronda los 40, y que se vieron absolutamente recompensados con el conciertazo que Whitfield Crane y los suyos cuajaron.


Las motos no faltaron a su cita en esta segunda jornada de festival y nos amenizaron la espera para la banda que todos los asistentes queríamos ver: Extreme, cuya actuación en el Garage Sound Festival sería su única actuación en España en este 2017. La banda liderada por Gary Cherone y Nuno Bettencourt no tocaron finalmente el Pornograffitti entero, ni falta que los hizo, ya que salieron totalmente victoriosos dando el bolo del festival. Con el comienzo con It (´s A Monster) ya nos tenían a todos en el bolsillo y nos mantuvieron embobados, cantando y bailando durante todo su actuación. Gary Cherone cantando a las mil maravillas y Nuno dando una masterclass de cómo tocar la guitarra, con su momento álgido en la interpretación de Midnight Express. No faltó el momento romántico, claro, y es que en un concierto de Extreme nunca podrá faltar More Than Words. Poco antes de abandonar el escenario vino otro solo de Nuno, al que siguió Decadence Dance que sonó a gloria y acabó por hacer aquello una fiesta enorme. Al poco tiempo la banda volvió para interpretar dos temas más; Warheads y We Are The Champions de Queen. Tras esto, habiendo tocado más del tiempo programado, la banda se despidió de nosotros dando las gracias fervientemente, sobre todo Nuno, que bajó hasta el público y se tiró un buen rato chocando y estrechando manos con quien lo quiso.


Y tocaba seguir encadenando bolazos, ya que Thunder, como era evidente, se salieron. La banda liderada por Danny Bowes dio un recital de clase y rock. Abriendo su concierto con Wonder Days, de su disco homónimo, ya se podía prever que la banda había salido enchufada. Los grandes clásicos como River Of Pain o Higher Ground comenzaron a desfilar. Y no faltó el tema sorpresa, ya que cuando vi que a Luke Morley le colocaban la acústica a mitad de concierto no podía ser más que para Low Life In High Places, y así fue. Qué delicia. El único pero del concierto fue que se les echó el tiempo encima y tuvieron que marcharse con I Love You More Than Rock´N´Roll sin poder tocar el tremendo Dirty Love, que encima en directo es genial por ser alargado unos cuantos minutos extra. Aún así, dieron un grandísimo concierto que no creo que dejase a nadie defraudado.


Tras ellos salieron a escena Nashville Pussy, el cansancio empezaba a hacer mella y los había visto hace muy poco, pero nuestro fotógrafo si se quedó a disfrutarlos. Asegura que su directo volvió a no decepcionar, dándolo todo para mantener el calor del escenario con su corrosivo rock n’ roll. Clásico tras clásico consiguieron convencer una vez más. Gibson, Marshall, gorra de mecánico, bigotón y escotes prominentes; señas de identidad de una banda que sigue poniendo toda la carne en el asador por muy tarde que sea y cansado que esté el público. Perfectos para vaciar la calderilla de los bolsillos e invertirlos en cerveza.


Una primera edición que ha funcionado a la perfección, cumpliendo los horarios programados, con gran sonido para todas las bandas, gran organización y gran cartel. Muchas ganas de que el festival siga hacia adelante y volver a pisarlo el año que viene.