The Wildhearts es uno de los secretos mejor guardados del rock’n’roll británico, y «Vanilla Radio» es, probablemente, lo mejor que ha parido el grupo de Ginger. Por su estribillo infeccioso, su riff, y el alto contenido energético que desprende, este temazo de ferocidad punk y corazón power-pop funciona mejor que un cubo de Prozacs cuando estás de bajona, y los únicos efectos secundarios son las ganas de volver a darle al play una y otra vez. Where’s my Elvis??