Sello: Autoeditado.

Texto por Beto Lagarda.


¿Es posible que el álbum debut de una banda en pleno 2017 con casi todo inventado logre jugar con las delgadas lineas que separan un disco excelente de una maravilla? Ring of Gyges ha logrado este hito con Beyond the Night Sky, una obra vibrante e intensa, cargada de detalles y de momentos brillantes.

La banda fue fundada en 2013 por Helgi Jónsson en la guitarra y las voces, Einar Cortes en la batería y Gudjón Sveinsson, también guitarrista, en la localidad-suburbio de Kópavogur ubicada a las afueras de Reykjavik. Tras un EP autoeditado en 2015 titulado Ramblings of Madmen, su primer larga duración es presentado en sociedad a finales de este 2017 bajo en nombre Beyond the Night Sky.

Se trata de un álbum conceptual muy ambicioso con bellas referencias retro al rock progresivo y psicodélico de los 70 de bandas como Pink Floyd, King Crimson o Jethro Tull, a la vez usan elementos del metal progresivo del estilo de Soen, Haken o Agent Fresco y todo ello lo untan con pinceladas de avant-garde. Los nueve temas son complejos, con frecuentes cambios de tempo y llenos de grandes momentos instrumentales. El álbum te va mostrando una amplia gama de emociones a lo largo de la casi hora de duración del mismo, se trata de un álbum con innumerables soluciones para nada estándares en cuanto a la sección rítmica, armonías vocales encantadoras y trabajados solos. Contiene nada más y nada menos que ocho solos de guitarra, tres de teclados, dos de flauta y uno de saxofón, y además también podemos encontrar violonchelos, violín, viola y un clarinete.

Es dificil expresar brevemente qué constituye la singularidad de este trabajo porque realmente hay mucho en él. Tratar de comentar el disco se antoja sumamente complicado, pues son tantos los detalles y pasajes que cada tema en solitario merecería un análisis profundo, pero si puedo enalzar como Ascend y Advaka, los dos temas que abren el disco arrancan como si de Soen se tratara para fundirse en un complejo tema con teclados hermosos que recuerdan a John Lord de Deep Purple, Dusk con sus casi catroce minutos parece sacado de Mountain, el grandioso disco de Haken; (Instru)mentaly nos abre una puerta a King Crimson o Death’s Door con unos solos que parecen firmados por David Gilmour. Podemos encontrar momentos inspirados en Leprous o Pain of Salvation, otros de ELP o hasta The Doors.

La energía de la banda es fascinante, así como su romanticismo traducido en canción. Ring of Gyges lorga llevar al oyente a través de un viaje increíble por el mundo del sonido más colorido y extenso. Nunca deja de sorprender la belleza de las melodías residen, que lo convierten en un álbum obligado, no solo para los seguidores del rock progresivo, sino para los oyentes que admiran la música en mayúsculas.