«Mein Teil» es uno de los temas más duros de Rammstein, el cual usó la banda alemana como primer adelanto del disco Reise Reise (2004), para el que terminó triunfando el afamado y amigable single «Amerika». Hablamos no solo de uno de los temas más bizarros de la banda, sino de toda su excepcional discografía. Till Lindemann dijo en alguna ocasión que usaban la paradoja de «tema duro letra suave, letra dura tema suave», norma que no se cumple en este tema tan desagradable en lírica como pesado y terrorífico en las formas.
«Mein Teil» se traduce como «mi parte», y trata de retratar el escabroso caso del Caníbal de Rotemburgo, Armin Meiwes, y su sumisa y consciente víctima Bernd Jürgen Brandes. Para el que no conozca el caso: Meiwes publica un anuncio en Internet buscando un hombre que estuviera dispuesto a dejarse mutilar y comer, y Brandes, un ingeniero berlinés, leyó el anuncio fascinado porque era justo lo que estaba buscando desde que era niño, que lo castraran y se lo comieran. En marzo de 2001 los dos hombres se dieron cita y pasó lo que tenía que pasar, Meiwes cortó y pasó por la sartén el pene de Brandes y se lo comieron juntos. Después, Brandes murió desangrado y Meiwes congeló el cadáver para ir comiéndoselo poco a poco. Meiwes fue capturado, una policía registró su casa y lo tuvo claro «también soy ama de casa y esta carne congelada no es ni de ternera ni de cerdo». Armin Meiwes fue condenado a cadena perpetua. Para los interesados, os dejamos al final del artículo un documental con todos los detalles del caso, incluida entrevista al caníbal.
El vocalista Till Lindemann vio que el caso era tan depravado que resultaba fascinante «simplemente tenía que haber una canción sobre ello». El título, «mi parte», hace referencia al pene de la víctima:
Heute treff’ ich einen Herrn, | Hoy he quedado con un señor |
der hat mich zum Fressen gern. | al que le gustaría comerme. |
Weiche Teile und auch harte | Las partes blandas y también las duras |
stehen auf der Speisekarte. | forman parte del menú. |
«Mein Teil» fue foco de una considerable polémica en Alemania, el tema en sí y el videoclip que lo acompañaba, la MTV alemana se vio obligada a emitirlo en horario nocturno (posteriormente vendrían vídeos todavía mas censurados, pero de eso hablaremos otro día). Felaciones, peleas, convulsiones, Christian Lorenz travestido de mujer (bueno, eso es bastante normal) y Christoph Schneider como dominatrix remilgada paseando como perros a la banda con correas en la salida de una estación de metro de Berlín. ¡Vivan Rammstein!
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