Bloodbath – The Arrow Of Satan Is Drawn.
Sello: Peaceville Records.
Texto por Txiki Kilmister.
Este 2018 supone el regreso de Bloodbath a la actividad tras cuatro años de su anterior trabajo, el majestuoso Grand Morbid Funeral, y lo que nos encontramos en esta nueva pieza es a unos Bloodbath que suenan más malvados, macarras y pútridos que nunca; y es que la superbanda ha decido subir al máximo sus viejos pedales Boss HM-2 para sonar más añejos que nunca.
Bajo la espectacular e inquietante portada, obra de Eliran Kantor, este The Arrow Of Satan is Drawn recoge 10 cortes de puro death metal sueco en apenas 40 minutos, en una vena totalmente Dismember o Entombed, donde la voz de Nick Holmes es el complemento perfecto para esa tormenta de riffs que hacen de esta obra un homenaje al death metal más crudo y visceral. Este disco es un oda al headbanging por los cuatro costados. Canciones como March of The Crucifers o Chainsaw Lullaby harán que no puedas dejar de mover la cabeza al ritmo de esos viciosos riffs, pero también hay espacio para la oscuridad en temas como Morbid Antichrist o Levitator, y tampoco se olvidan de ese death metal macarra donde la influencia de Motörhead es más que palpable en temas como Deader, Warhead Ritual o Wayward Samaritan.
No sería de recibo dejar pasar el excelente trabajo vocal en este disco de Nick Holmes, el vocalista de Paradise Lost pese a tener un registro menos gutural y profundo que sus antecesores en el puesto (Mikael Akerfeldt y Peter Tägtgren) dota a este trabajo de una maldad vocal que va como anillo al dedo al sonido de la banda. Es cierto que hace años entre muchos fans de la banda se sembró la controversia cuando se anunció que Holmes sería el vocalista de Bloodbath, y más cuando por aquel entonces el bueno de Nick llevaba sin hacer guturales desde los primeros tiempos de Paradise Lost, pero sólo podemos decir que con el paso del tiempo, en la idea de perseverar y profundizar en el sonido de la vieja escuela sueca death metal, su elección fue de lo más apropiada…. y hablando de vocalistas ilustres, tampoco podemos dejar pasar la colaboración de Jeff Walker de Carcass, Karl Willets de Memoriam y Bolt Thrower y John Walker de Cancer en uno de los temas estrellas de este disco como es Bloodcide.
En definitiva, The Arrow Of Satan Is Drawn nos ofrece la mejor versión de la banda y es que este disco es un verdadero baño de sangre en cuanto a death metal se refiere, y no tenemos ninguna duda que este será uno de los mejores trabajos del año lanzados en el género. Bloodbath es una banda que hace bueno ese dicho de que la excepción confirma la regla, ya que es difícil encontrar un supergrupo que se mantenga en tan en buena forma con el paso de los años y que siga lanzando trabajos de tan alta calidad.