The Dry Mouths – Memories from Pines Bridge (2019)
Por Manuel J. González.
Me hubiera gustado escribir este texto pensando tan solo en la música y en todo aquello que provoca su nacimiento, pero en este caso no ha podido ser así. Tampoco pretendo que mis palabras sirvan de epitafio del joven Andrés Reyes, bajista de la formación almeriense que nos dejó a una edad demasiado temprana hace unos días. No le conocí en persona, pero sé a través de sus compañeros en The Dry Mouths que era un excelente ser humano y un tremendo músico. Es fácil creer semejantes afirmaciones cuando uno se deja embelesar con esta maravilla bautizada con el nombre de “Memories from Pines Bridge”; evocador título que acompaña un precioso y sugerente artwork de la mano de Iván Carreño.
«Nuestra intención es crear una sensación sonora con la que ahondar en la mente hacia recuerdos de un pasado que añoramos, cuya memoria queda lejos en una sensación que se desvanece, que a veces aflora, y nos hace revivir experiencias que aún permanecen en nuestro inconsciente, que nos hacen ser quienes somos, que representan la crudeza de nuestras vidas…» comentan The Dry Mouths a modo de presentación de esta introspectiva colección de piezas que pretenden ser muestra de la más excitante experimentación. Casi recién llegado de Yucca Valley percibo mucho desierto entre los surcos de este sigiloso aunque efectista envite del trío español de delicado stoner pop. Sin embargo, suenan más osados, más libres; más desatados. Para muestra esa joya de casi diez minutos llamada “Impromental VII: Moustachette”, a través de la cual eres capaz de escuchar el tímido sonido del arroyo desértico, así como el aullido del escurridizo lobo – Fred Drake se sentiría feliz con estos sonidos. La formación, que me enamoró con el breve aunque intenso “When the Water Smells of Sweat” [2018, Spinda Records, entre otros], consigue que los terrenos ahora explorados se nos antojen todavía más cinematográficos, teniendo en cuenta que las improvisaciones contenidas en este nuevo trabajo fueron registradas hace ya bastante tiempo.
Estoy completamente seguro de que si Mario Lalli y Gary Arce escucharan estas composiciones instrumentales, quedarían gratamente sorprendidos. Tan solo espero que alguien les acerque una copia de este excepcional trabajo ahora que regresan a España al frente de mis venerados Yawning Man. Andy, Christ O. y Josh crean magia paisajística, utilizando sencillos elementos perfectamente planteados; efectivamente, son como postales que ansías recibir: emotivos recuerdos de una vida que, sobre todo en este caso, no volverá a repetirse de esa manera tan única e inmortal. ¿Cómo no caer rendido frente a la poesía de “La Chaussure”? ¿Cómo no cerrar los ojos con “Low Savvia” e imaginarte en lo alto de un cañón en medio de la nada existencial? ¿Piensas quedarte llave en mano frente a la puerta de tu propio corazón? Tan solo puedo decir una cosa: «si alguna vez creíste en el desierto, este disco te hará amarlo un poco más».