Explicar la mística de un evento como Roadburn es a veces complicado, ya que cualquiera pudiera pensar que se trata tan solo de otro festival de música. Los que han visitado Tilburg en el mes de abril saben de qué hablo, ya que el famoso festival, que ahora cumple dos décadas, es desde mi punto de vista el evento más exclusivo de rock sin etiquetas. Con semejante afirmación tan solo intento plasmar la idea de que Roadburn es mucho más que un festival musical al uso. Y ya no solo por la variedad en la oferta de actuaciones y estilos, sino por el ambiente y camaradería que se respira durante todo el fin de semana sin que apenas llegues a comunicarte verbalmente con un público que arriba de todos los rincones del mundo. No hay reglas, ni realmente guías, pero todo es extremadamente tácito. Intentaré enumerar aquellas formaciones o artistas que desde mi punto de vista son un must durante los dos primeros días de esta edición.
Por Manuel J. González.
Jueves
El menú del primer día se antoja tan adictivo como vertiginoso, sabiendo de antemano que los solapes durante esta primera jornada serán ciertamente dolorosos. El arranque con Amalie Bruun y sus Myrkur presentando el set Folkesange no podría haber sido mejor elección para iniciar estas orgiásticas sesiones musicales. La danesa se ha labrado una merecida reputación mezclando el folk nórdico con la más poética oscuridad. En esta ocasión se hará acompañar de Christopher Juul de los eclécticos Heilung y del celista Jo Quail, además de algunos coristas. Esperemos que el tren no nos juegue una mala pasada y podamos disfrutar de esta excelente intérprete.
Tras el sosegado envite de Myrkur nos acercaremos al recinto Hall of Fame para comprobar la rabia escénica de los post hardcorianos islandeses Great Grief. Ciertamente, no inventan nada, aunque “Love, Lust and Greed” [2018, No Sleep Records] es perfecto para desperezarse tras el madrugón del viaje. Confío en que sean una de las sorpresas del fin de semana, ya que los elementos black metaleros contenidos en piezas como la premonitora “Escaping Reykjavik” confirman a los isleños como un combo al que no le gusta encorsetarse.
Tambaleándonos – y espero que con alguna IPA ya en el cuerpo – nos trasladaremos al acogedor Het Patronat para degustar la original receta de las brasileñas Rakta. Curiosamente, este abril presentan el larga duración “Falha Comun”, anticipando su histrionismo con piezas como “Flor da Pele”; desde luego que la locura estará garantizada. Hagan sonar “Rodeados pela beleza” y después hablamos.
Será muy duro renunciar al acústico de los estadounidenses Thou – para más inri nos estaremos perdiendo además a los excitantes Fotocrime –, pero dudo que exista una oportunidad tan exclusiva de validar la oferta de Kristin Hayter, más conocida por su salvaje hacer frente a Lingua Ignota, una formación que ha sacudido de manera única nuestras entrañas durante los últimos tiempos. No reconocer “All Bitches Die” como la verdadera vanguardia artístico musical es como cerrar los ojos al devenir melómano. ¿Estaremos preparados para dejarnos violar por su ímpetu vocal?
Y no, no hay intención premeditada en que sean las mujeres las que nos abracen durante este intenso primer día. Aunque me parece delicioso que así sea, ya que son ellas las que realmente nos agitan. Es precisamente eso lo que esperamos que nos haga Emma Ruth Rundle, una artista que poco tiene demostrar ya, y que nos apetece ver en formato banda. “On Dark Horses” [2018, Sargent House] es un delicado y embriagador trabajo que nos transporta a parajes desoladores e introspectivos. Imagino que nos daremos la mano y nos emocionaremos mientras interpreta piezas como “Control”.
Con el alma vacía nos acercaremos al escenario principal e intentaremos que la épica de los daneses Heilung nos resucite. Su propuesta ciertamente tribal no es apta para todos los públicos, pero cuando escuchas varias veces su directo “LIFA” [2017, Season of Mist], no puedes evitar querer vivir la experiencia en ese mismo formato. En palabras del combo: «Remember, that we are all Brothers, All People, beasts, trees and stone and wind…». Creo que el mensaje es claro, y necesario. Será un placer sentir la embestida de la naturaleza más osada y oscura.
Confiando que nos queden energías para seguir muriendo una y otra vez, correremos raudos a degustar la fórmula de los londinenses Bliss Signal en la acogedora Green Room. De un tiempo a esta parte necesitamos esa experimentación electrónica shoegaziana, ya que gracias a ella somos capaces de sorprendernos a nosotros mismos. Su homónimo disco [2018, Profound Lore] es una absoluta gozada; uno de esos viajes a los confines del propio interior humano. Solo espero poder cerrar los ojos y olvidar la propia existencia.
Confiemos en tener al menos dos vidas ese jueves por la noche, ya que la actuación en la que los japoneses Mono van a interpretar su obra maestra “Hymn to The Immortal Wind” de la mano de Jo Quail Quartet, puede convertirse en uno de esos momentos en los que abrazas la música como si la vida se te fuera en ello. Creo que sobran las palabras cuando se trata de piezas como “Pure as Snow (Trails of the Winter Storm) o esa eterna joya bautizada con el nombre de “Burial at Sea”.
Milagroso será que me acerque a ver los predecibles aunque interesantes Cryp Trip tras la embestida nipona, pero a veces hay que hacer ciertos sacrificios por los amigos de verdad. Dios bendiga Roadburn y nuestra suerte de poder estar allí.
Viernes
Imagino que el viernes saciaremos nuestras panzas vía formato brunch, ya que los necesarios holandeses darán el pistoletazo de salida de esta segunda jornada a las dos de la tarde. Maravilloso. “Why aren´t You Laughing?” [2019, Artoffact Records] es la perfecta continuación al ya lejano [2017, Ván]. La hipnótica voz de la seductora Milena Eva es ideal para perderse en un mundo de sutil romanticismo y dulce post punk. Guitarras, sensuales ritmos y canciones de la talla de “Things I Wish I Never Knew”. Preciosos.
A continuación nos acercaremos al Main Stage para degustar a los Triptykon del legendario Tom G. Warrior, que interpretarán las tres partes de Requiem acompañados por una orquesta. La primera de ellas apareció en el “Into the Pandemonium” de los clásicos ochenteros Celtic Frost; su nombre: “Rex Irae”. La segunda parte ha permanecido inacabada hasta la fecha. Muchas ganas de experimentar semejante aventura.
La sala Hall of Fame dará la bienvenida a otra mujer: la interesante A.A. Williams, de la cual hemos podido degustar su breve y homónimo EP, que contiene joyas como la evocadora “Belong”, que confiemos que nos seduzca en este primer encuentro con la londinense. No hay duda de que debemos apostar por el interesante sello Holy Roar Records.
Tormenta, calma, tormenta. En Roadburn tú escoges el menú, y siempre es verdaderamente versátil. En este caso, continuaremos con la delicadez femenina; y de la mano de la consolidada Anna Von Hausswolff. La sueca ha sabido combinar desde sus inicios la oscura profundidad con el detallismo musical, en una fórmula que se disfruta desde la paz interior. Su actuación se incluye dentro de la selección bautizada por el curator de esta edición bajo el nombre de Burning Darkness. Su último trabajo, “Dead Magic” [2018, City Slang] nos acompaña por sinuosos parajes en los que la música te abraza con una sinceridad que abruma.
¿Qué duda cabe que el hombre cuarentón ansía siempre su ración de black metal? Es por ello que tras la actuación de Anna nos desplazaremos a esa mini catedral llamada Het Patronat a sentir el oscuro azote de Fauna. Desde Olympia, WA – al igual que sus contemporáneos Wolves in the Throne Room –, el combo estadounidense se acerca en piezas como la extensa “Soaring into Earth” a esos hermosos lugares naturales que a veces nos aterran por su belleza y eternidad.
Acto seguido abriremos nuestros corazones para que la colaboración entre Thou y Emma Ruth Rundle grabe en nuestro interior uno de esos momentos irrepetibles. No podemos ocultar nuestra fascinación por los de Baton Rouge, ni tampoco el deseo de saber cómo se hablarán la bella y la bestia sobre el frío escenario del Koepelhal. Tened claro que os lo contaremos; si es que somos capaces de recordar tras la experiencia.
Si tengo una formación fetiche en esta edición de Roadburn, estos son los californianos Drab Majesty. “The Demonstration” [2016, Dais Records] se ha convertido en uno mis trabajados preferidos durante los últimos tiempos; seguramente, por esa receta pop que tanto me retrotrae a esa época ochentera en la que comencé a descubrir esos primeros sonidos que me encaminaron por el placentero camino de la melomanía. Confío bailar hasta que no me queden energías.
Para concluir la velada escogeremos a los blackmetaleros suecos de Craft, que publicaron hace no mucho el impactante “White Noise and Black Metal” [2018, Season of Mist], y también a los blackgazianos Bosse-De-Nage; si es que queda algo de nosotros.